San Cristóbal.- El gobernador del Táchira, César Pérez Vivas exigió una sincerización de la situación de violencia que vive la frontera.
LORENA EVELYN ARRÁIZ
| ESPECIAL PARA EL UNIVERSAL
miércoles 30 de noviembre de 2011 12:00 AM
Afirmó que no se puede seguir ocultando una realidad que se ha
venido presentando en las últimas semanas como ha sido la confrontación
armada que se presenta en la región suroeste del estado y donde los
grupos armados, al margen de la ley, "se aprovechan de las asimetrías
económicas. Hay luchas por el control de las rutas del contrabando
ilegal tanto de combustible, como de drogas y alimentos".
Recordó hechos donde se ha dejado evidencia de la presencia de
irregularidades en el país. "En El Nula hubo una manifestación pública
donde los locales le pidieron a los representantes del Ejército de
Liberación de Colombia que abandonaran nuestro territorio".
También subrayó la situación con el Ejército que se presentó esta semana en la población de San Camilo en el municipio Páez del estado Apure, cerca del Táchira para demostrar la participación de esas organizaciones irregulares.
"La sistemática pugnacidad en el municipio Libertador entre los grupos de las Fuerzas Bolivariana de Liberación y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia por el control de los sindicatos y de los grupos que trabajan en la represa de La Vueltosa así como la situación que se presenta en el municipio Ayacucho donde hemos tenido desplazados hacia la ciudad de Colón como consecuencia de la violencia, demuestra que cada vez más toman espacios del país," dijo.
Pérez Vivas también hizo referencia a la masacre de Chururú donde fueron secuestrados y asesinados un grupo de hombres que conformaban un equipos de fútbol. Reclamó que de ese tema no ha vuelto a mencionar. "No se hizo ninguna investigación seria, profesional para determinar cuál organización asesinó a estos jóvenes. No se conocen las razones de este hecho. Fue una ejecución y no una confrontación que justificara esta situación de violencia en esa zona".
Refirió que esos grupos armados han sido denominados como paramilitares, "Águilas Negras", Fuerzas Bolivarianas, entre otros nombres, pero que tienen un común denominador "son grupos violentos, armados, al margen de la ley".
Pidió a los gobiernos de Venezuela y Colombia que asuman la verdad de los hechos y que traten de controlar y someter a esos grupos armados. Afirmó que se ha puesto a la orden del Presidente de la República para cooperar en la solución del problema.
"Si hay una voluntad política, si, pero si vamos a hacernos los desentendidos, lo que no sabemos, los que no entendemos para darle protección a estos grupos, pues, bueno, sigamos con esta hipocresía. Sigamos echándole la culpa a los demás y que este problema siga agobiando y afectando al pueblo, especialmente el de la frontera", puntualizó.
Policía del Táchira desarmada
Con respecto a la presencia de la Policía del Táchira para resguardar zonas fronterizas, Pérez Vivas sostuvo que Politáchira no tiene capacidad operativa para cubrir los sitios violentos de la frontera.
"Es una policía meramente administrativa con armamentos muy limitado". Rememoró que la Policía fue desarmada por el Gobierno nacional. En ese procedimiento les decomisaron armas largas y dos mil pistolas aproximadamente. "Por eso, anoche (lunes) en la población de Cordero, una patrulla policía fue totalmente abaleada por hombres que tenían armas de alta potencia y nuestros policías tenían revólveres. Es imposible combatir de esa manera", expresó.
También subrayó la situación con el Ejército que se presentó esta semana en la población de San Camilo en el municipio Páez del estado Apure, cerca del Táchira para demostrar la participación de esas organizaciones irregulares.
"La sistemática pugnacidad en el municipio Libertador entre los grupos de las Fuerzas Bolivariana de Liberación y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia por el control de los sindicatos y de los grupos que trabajan en la represa de La Vueltosa así como la situación que se presenta en el municipio Ayacucho donde hemos tenido desplazados hacia la ciudad de Colón como consecuencia de la violencia, demuestra que cada vez más toman espacios del país," dijo.
Pérez Vivas también hizo referencia a la masacre de Chururú donde fueron secuestrados y asesinados un grupo de hombres que conformaban un equipos de fútbol. Reclamó que de ese tema no ha vuelto a mencionar. "No se hizo ninguna investigación seria, profesional para determinar cuál organización asesinó a estos jóvenes. No se conocen las razones de este hecho. Fue una ejecución y no una confrontación que justificara esta situación de violencia en esa zona".
Refirió que esos grupos armados han sido denominados como paramilitares, "Águilas Negras", Fuerzas Bolivarianas, entre otros nombres, pero que tienen un común denominador "son grupos violentos, armados, al margen de la ley".
Pidió a los gobiernos de Venezuela y Colombia que asuman la verdad de los hechos y que traten de controlar y someter a esos grupos armados. Afirmó que se ha puesto a la orden del Presidente de la República para cooperar en la solución del problema.
"Si hay una voluntad política, si, pero si vamos a hacernos los desentendidos, lo que no sabemos, los que no entendemos para darle protección a estos grupos, pues, bueno, sigamos con esta hipocresía. Sigamos echándole la culpa a los demás y que este problema siga agobiando y afectando al pueblo, especialmente el de la frontera", puntualizó.
Policía del Táchira desarmada
Con respecto a la presencia de la Policía del Táchira para resguardar zonas fronterizas, Pérez Vivas sostuvo que Politáchira no tiene capacidad operativa para cubrir los sitios violentos de la frontera.
"Es una policía meramente administrativa con armamentos muy limitado". Rememoró que la Policía fue desarmada por el Gobierno nacional. En ese procedimiento les decomisaron armas largas y dos mil pistolas aproximadamente. "Por eso, anoche (lunes) en la población de Cordero, una patrulla policía fue totalmente abaleada por hombres que tenían armas de alta potencia y nuestros policías tenían revólveres. Es imposible combatir de esa manera", expresó.
A su juicio el desarme de la Policía "fue deliberado para evitar
que pudiera someter a la ley a estos grupos armados". Fustigó que el
Gobierno nacional no asuma su responsabilidad en la entidad.
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